sábado, 1 de junio de 2013

Dos jóvenes protestantes hablan en el metro sobre El mundo no se acaba



-- Simic, a primer vista, parece un buen poeta, pero
si insistes notas que no es tan bueno; algo falla, quizá
que viene de un país del Este y que fue pobre.
-- Sí, la poesía, es una profesión de ricos. 


4 comentarios:

Darío dijo...

Voy a tener que renunciar a todo intento. Los sudacas siamo fuori...

anónima dijo...

Sudacas? yo también lo soy y no desespero, ánimo Darío eso de ser rico para ser poeta no es nuevo, antes del protestante ya lo dijeron otros

Anónimo dijo...

El sentido del humor de Charles Simic no es tan elaborado como el de Ferrer-Lerín pero es efectivo.

Anónimo dijo...

Los poetas ricos pueden publicar, ésa es la diferencia material. Los pobres siguen escribiendo y blasfemando, cosa que a los ricos les ofende. La estética cazada por la ideología.